No utilizar productos específicos para esta zona tan delicada del cuerpo o no tener en cuenta la etapa de la vida son algunos de los errores comunes que cometen las mujeres en cuanto a higiene íntima.

La higiene íntima femenina es un aspecto esencial del bienestar y la salud de las mujeres en todas las etapas de su vida. Si bien durante mucho tiempo ha sido un tema tabú, y todavía hoy es algo de lo que no se habla en exceso, actualmente existe una mayor conciencia generalizada sobre la importancia de utilizar artículos específicos que respeten el equilibrio natural de esta parte del cuerpo.
A diferencia de lo que ocurre con otros productos de higiene corporal, los destinados a la zona íntima han de tener formulaciones cuidadosas que respeten el pH y eviten irritaciones e infecciones. Por eso, los expertos señalan que la elección de ingredientes activos adecuados es esencial para garantizar eficacia, seguridad y respeto por la microbiota vaginal.
Además, también resulta importante tener en cuenta que las necesidades de higiene íntima varían a lo largo de la vida de la mujer. Durante la menstruación, el embarazo, la menopausia y algunos momentos especiales como el postparto, la mucosa vulvar puede volverse más sensible, de modo que requiere el uso de productos adaptados.
Tal es la importancia de darle a esta zona tan delicada del cuerpo los cuidados personalizados que necesita, que desde los laboratorios trabajan constantemente en innovaciones y en el desarrollo de nuevas texturas y fórmulas sin sulfatos ni perfumes que refuercen la flora vaginal. No obstante, pese a la amplia variedad de artículos que se encuentran actualmente en el mercado y a que cada vez se habla más del tema, todavía existe mucho desconocimiento acerca de la higiene íntima femenina. Por eso, desde la farmacia, se puede asesorar, ofrecer información rigurosa y personalizada a sus pacientes, así como promover hábitos de cuidado respetuosos con la salud íntima.
Ingredientes para el cuidado de la zona íntima
En primer lugar, las mujeres deben entender que no sirve cualquier producto para cuidar de su zona íntima. De hecho, han de estar especialmente diseñados para ello y contar con un listado de ingredientes adecuados que aporten beneficios a esta zona tan sensible del cuerpo. Por ejemplo, María Capdevila, Product Manager de Cumlaude Lab, explica en declaraciones a farmanatur que en el caso del laboratorio para el que trabaja han reformulado su gama de higiene íntima incorporando extractos de plantas mediterráneas y el postbiótico Lactobacillus Ferment.
Cabe señalar que los postbióticos son compuestos bioactivos generados por microorganismos inanimados que tienen beneficios para la salud y el bienestar de quieneslos consumen. Por lo que hace al Lactobacillus Ferment, María Capdevila apunta que “es fundamental para el cuidado integral de la zona íntima, ya que contribuye a mantener la microbiota de la zona vulvar, a reparar e hidratar la barrera cutánea, y a reducir la sequedad, las rojeces y la pérdida de agua transdérmica”.
No obstante, la formulación de cada producto depende de las propiedades que se quieran conseguir. En este sentido, la experta indica la caléndula como ingrediente con propiedades suavizantes, refrescantes, calmantes y protectoras. Si se busca un componente reequilibrante, el extracto de malvavisco y árnica puede ser ideal, y además es calmante contra el prurito. Por último, explica que otros productos de Cumlaude Lab contienen clorhexidina y mezclas de extractos de plantas con acción antimicrobiana, como son las siguientes: Origanum vulgare, Thymus vulgaris, Cinnamomum zeylanicum, Rosmarinus officinalis, Lavandula officinalis, Menta y Olea europea.
Productos específicos para cada etapa
Además de tener en cuenta las propiedades de los ingredientes para escoger un producto que ayude a cumplir un determinado objetivo, como puede ser suavizar, proteger o calmar la zona íntima en un momento dado, otra cuestión que las mujeres deben comprender es que existen artículos en el mercado adaptados a las diferentes etapas de la vida y a sus necesidades específicas.
En relación a esto, la especialista de Cumlaude Lab hace referencia a los diferentes pH que tienen los productos del laboratorio según el momento de la vida para el que estén diseñados. Para mujeres en etapa fértil, por ejemplo, indica un gel limpiador con un pH ácido (4,1) que respete el pH fisiológico de la piel y las mucosas sensibles. En periodos de mayor hipersensibilidad, como la etapa climatérica y la menopausia, un pH neutro de 6,8 puede ser lo más adecuado. Por último, en caso de excesivo desarrollo de la flora microbiana local, durante el embarazo, tras las relaciones sexuales y durante el ciclo menstrual, recomienda un gel limpiador con un pH fisiológico vulvar de 5,5.
Sobre esta cuestión, y antes de continuar, cabe hacer un inciso para detallar que el pH es una medida que indica el nivel de acidez de la piel y que puede oscilar entre el 0 y el 14. El 7 es el punto neutro, y el 5,5, que es ligeramente ácido, está considerado por los expertos en la materia como el punto óptimo para la salud de la piel. En la zona íntima, el pH suele estar entre el 4 y el 6, y mantenerlo en estos niveles es esencial para la salud vaginal, señalan los especialistas.
Dicho esto, María Capdevila repite que hoy por hoy se sigue trabajando en innovaciones en el ámbito de la higiene íntima femenina. En el caso concreto de Cumlaude Lab, piensa que la reformulación de productos que ha llevado a cabo con extractos de plantas mediterráneas y el postbiótico Lactobacillus Ferment es un claro ejemplo de “su compromiso con la salud intima de la mujer, porque estas innovaciones no solo protegen y equilibran la microbiota, sino que también fortalecen la barrera cutánea, hidratan profundamente y combaten factores externos que pueden afectar la salud íntima”.
El farmacéutico/a, clave para una buena salud íntima
El farmacéutico o farmacéutica, como profesional de salud que se encuentra a pie de calle, es el experto al que las mujeres pueden acudir en un primer momento en busca de ayuda para pedir consejo acerca del tema que nos ocupa. Así, este debe recomendar en cada caso particular un producto específico a cada mujer según sus necesidades. Pero además, debe informar rigurosamente sobre las rutinas de cuidado íntimo a seguir, pues todavía existen errores comunes que comete parte de la población.
En experiencia de María Capdevila, aún es habitual utilizar productos no específicos para la zona íntima, “lo que puede alterar el pH y la microbiota de la zona”. También señala como fallos habituales “el exceso de limpieza con duchas o lavados vaginales o el uso de ropa interior sintética que no permite la transpiración adecuada”. Por último, indica que “tampoco se presta atención a las necesidades específicas de cada etapa de la vida, lo que puede resultar en un cuidado inadecuado”.
Por esta razón, desde Cumlaude Lab comparte con los farmacéuticos la necesidad de “asesorar a sus pacientes sobre la importancia de utilizar productos específicos para la higiene íntima que respeten el pH y la microbiota de la zona vulvar”. Asimismo, María Capdevila enumera unos cuantos consejos más que este profesional sanitario debería ofrecer a las mujeres que visitan la oficina de farmacia en busca de asesoramiento individual.
En este sentido, bajo su punto de vista, estas son las recomendaciones que el profesional de la salud debe hacer a sus pacientes: “Evitar jabones tradicionales y promover el uso de jabones Syndet, formulados con tensioactivos sintéticos más suaves y menos irritantes para la piel; evitar el uso excesivo de productos de higiene íntima, que puede llevar a la sequedad y la irritación; evitar irritantes con fragancias fuertes, colorantes o ingredientes agresivos que puedan alterar el equilibrio natural de la zona íntima; utilizar ropa interior adecuada de algodón y evitar prendas ajustadas que causen fricción e irritación; mantener la zona seca, pues la humedad puede favorecer el crecimiento de bacterias y hongos y adaptación a las etapas de la vida”.

