Los científicos ya han conseguido virus artificiales, y ahora quieren crear bacterias y células desde cero. Los investigadores ya han conseguido diseñar microbios sintéticos para producir fármacos de forma más rápida y económica para combatir la malaria.
Todos los organismos vivos provienen de una célula original de la que surgieron todas las células que han existido en la Tierra. Los expertos en biología sintética quiere crear vida artificial desde cero, sin depender de esta célula original, y diseñar la primera célula artificial de la historia: es decir, la primera muestra de vida totalmente artificial. Los investigadores ya han conseguido crear virus sintéticos, pero ahora quieren conseguir crear estructuras vivas como bacterias y células más complejas.
Otro objetivo de la biología sintética es la creación de nuevos procesos en sistemas vivos. “El diseño y el rediseño de organismos vivos nos permitirá dotar virus, bacterias y otras células con nuevas funcionalidades que no tienen en su estado natural”, destaca Jordi Garcia-Ojalvo, catedrático de la Universidad Pompeu Fabra y líder científico de este B·Debate, Centro Internacional para Debate Científico, una iniciativa de Biocat y la Obra Social “la Caixa”.
Los mejores investigadores internacionales en esta disciplina se reúnen los próximos 17 y 18 de septiembre en CaixaForum Barcelona convocados para analizar cómo acercar los avances en biología sintética a las personas y mejorar así nuestra calidad de vida.
Los encuentros en biología sintética permitirán disponer de nuevas terapias para tratar enfermedades, así como acelerar y abaratar la producción de medicamentos. Algunas de las aplicaciones más destacadas son:
- Bacterias para detectar y tratar células tumorales. El rediseño de estos microorganismos hace que produzcan una proteína que les permite engancharse a las célula malignas y atacarlas. Con este tipo de técnica los científicos ya han conseguido actuar sobre genes causantes del cáncer (oncogenes) en tumores de ratones.
- Obtención más rápida de opioides. Recientmente, científicos de la Universidad de Stanford (EE UU) han conseguido producir narcóticos en una cepa de levadura para acelerar la producción de estos analgésicos, los más utilitzados para tratar personas con dolor.
- Medicamentos al mayor contra la malaria. La artemisina es una molécula que pertenece a la familia de fármacos con la respuesta más eficaz contra la malaria. Pero al obtención en su estado natural es muy lenta. Los científicos han conseguido multiplicar por 15 la producción de artemisina trasladando su fabricación en una cepa sintética de levadura, en lugar de la planta original.
- Biocombustible a partir de E. coli. El rediseño de la bacteria E. coli, común en nuestra flora bacteriana, es capaz de producir biocombustible muy similar al diesel. Los científicos confían en investigadores de estas características para potenciar las energías renovables y sostenibles.
- Microorganismos que coman petróleo. El medio ambiente también puede ser uno de los grandes beneficiados por los avances en biología sintética aplicada al entorno, gracias al diseño de bacterias que eliminen contaminantes ambientales como un vertido de petróleo en el mar. La aplicación de microorganismos vivos en un medio contaminante para limpiarlo se llama biorremediación.