Es la propuesta que los expertos europeos reunidos en el primer congreso bienal de la Asociación Mundial de enfermedades infecciosas y trastornos inmunológicos. La falta de homogeneidad en las recomendaciones de vacunación del adulto implica que las coberturas vacunales estén por debajo del nivel óptimo
Durante el primer congreso bienal de la Asociación Mundial de enfermedades infecciosas y trastornos inmunológicos (WAidid por sus siglas en inglés), celebrado en Milán entre el 18 y 20 de febrero, se han presentado las conclusiones de la revisión de los postersrealizados por un grupo de expertos europeos en colaboración con Sanofi Pasteur MSD, los cuales demuestran la sorprendente carga que tienen en Europa las enfermedades infecciosas prevenibles en las personas mayores. Esto es debido a las bajas coberturas vacunales y a la falta de homogeneidad en las recomendaciones de vacunación del adulto.
“En la población pediátrica las enfermedades prevenibles mediante vacunación ahora están bien controladas debido a las altas coberturas vacunales que se manejan en este grupo de población, sin embargo, un número mucho mayor de casos de algunas de estas enfermedades infecciosas se producen en las personas mayores, sobre todo por el envejecimiento de la población, ya que cada vez hay mayor número de población senior”, señala la Dra. Susanna Esposito, pediatra de la Unidad Infantil de Cuidados Intensivos y del Departamento de Fisiopatología y Trasplante del Hospital Mayor Policlínico de Milán. “Es importante entender que las vacunas no son sólo para los niños y que la vacunación también debe ser considerada como un componente clave de la prevención rutinaria para preservar la salud de nuestros mayores” concluye Esposito.
En el contexto en el que nos encontramos, con una población europea envejecida, las estrategias preventivas para reducir la carga de las enfermedades infecciosas prevenibles y salvar vidas se convierten es un componente muy importante. Asimismo, el objetivo de estas estrategias preventivas está también orientado a prevenir complicaciones graves que pueden traer consigo el declive funcional relacionado con la edad y que podrían conducir a la pérdida de autonomía.
Vacunas recomendadas en la edad adulta
Las vacunas recomendadas en Europa para las personas mayores, sobre todo para la población de 65 años o más están dirigidas, no sólo a proteger a este grupo poblacional contra enfermedades como la gripe, el neumococo, tosferina o el herpes zóster, sino que también tienen en cuenta su mayor vulnerabilidad debido a la disminución natural del sistema inmune con la edad (la llamada inmunosenescencia).
“En las personas mayores, estas enfermedades (gripe, neumococo o herpes zóster) pueden tener peores consecuencias que en las personas jóvenes. En algunos casos pueden traer consigo una serie de efectos que disminuyan el estado funcional de la persona afectada”, declara el Dr. Gaetan Gavazzi, Geriatra, especialista en medicina interna y en enfermedades infecciosas y tropicales en el Hospital A. Michallon de Grenoble (Francia). Por lo tanto, “estas enfermedades en personas mayores pueden ser el comienzo de la pérdida de su autonomía, a pesar de que podrían evitarse mediante la vacunación”, agrega.
En el caso de las coberturas vacunales en población infantil,más del 90% de los niños de 1 año de edad han recibido la vacuna contra la difteria, el tétanos y la tosferina (triple vírica) y la vacuna contra el sarampión, mientras que en las personas mayores las coberturas vacunales son mucho más bajas. Por ejemplo, a pesar de que la OMS recomienda tener unas tasas de vacunación contra la gripe del 75%, sólo 2 países han logrado alcanzar esas cifras: Países Bajos y Reino Unido.
Entre 2012 y2013 las coberturas vacunales contra el virus de la gripe en población adulta, sumando los 24 países europeos, tan solo alcanzó una media del 45%ii y actualmente, esta tasa sigue disminuyendo a nivel mundial en toda Europa.