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El rol del farmacéutico contra el tabaquismo: una ayuda clave

Uno de cada cuatro fumadores pide ayuda al farmacéutico para dejar de fumar. En España, el 64% de fumadores ha intentado dejarlo en alguna ocasión. Abandonar este perjudicial hábito es siempre más sencillo con el apoyo de un profesional

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tabaco (1)Según los últimos datos disponibles del Instituto Nacional de Estadística en 2017, más del 18% de mujeres españolas fuma a diario, mientras que el dato en hombres supera el 25%. En el caso de las mujeres, la mayoría de ellas tienen entre 45 y 54 años de edad. En los hombres, en cambio, es más frecuente en grupos de entre 25 y 34 años. Un análisis realizado por el Instituto Nacional de Estadística (INE) en 2018 refleja que el número de españoles que fuman a diario asciende a más de ocho millones y medio de personas. De acuerdo con los datos de la Asociación Española Contra el Cáncer, la Comunidad Valenciana es la región que registra un mayor número de fumadores, con un total de 1.033.087 personas.

Según Lorenzo Perni, el director de Activación de Marca de Johnson & Johnson Consumer Health, cada semana dejan de fumar 2.000 personas en España. Durante el confinamiento provocado por la COVID-19, según una encuesta realizada por el Ministerio de Sanidad, el 13,4% de los fumadores había intentado dejar de fumar, de los cuales el 8,9% había necesitado apoyo clínico. En este sentido, Perni asegura que “las sesiones personales con fumadores llevadas a cabo por personal de farmacia capacitado, en las que se incide sobre el cambio de comportamiento apoyado en una base científica, son el doble de efectivas en el objetivo de dejar de fumar, en comparación a si la persona que lo intenta no recibe ningún apoyo o si este es de menor intensidad”.

De hecho, según los especialistas, es una de las principales causas de mortalidad y afirman que entre las enfermedades más frecuentes producidas por el consumo de tabaco destacan los diversos cáncer que ocasiona, como el de pulmón (es la consecuencia más frecuente), de laringe (el 84% de los casos está provocado por esta causa), de vejiga (50%), de páncreas (13%) o de esófago (35%), entre otros. El accidente cerebrovascular, la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC) o la enfermedad vascular periférica son otras patologías consecuentes de este hábito. Aunque estos son solo unos pocos ejemplos, porque cada año la lista de enfermedades causadas por el tabaquismo aumenta.

La importancia del farmacéutico

Cada año, la Sociedad Española de Farmacia Clínica, Familiar y Comunitaria (SEFAC) celebra en el mes de mayo la “Semana sin humo”, cuyo objetivo es concienciar y ayudar a las personas que tienen la intención de dejar este nocivo hábito. Además, la corporación pone de relieve el papel del profesional farmacéutico en la cesación tabáquica y en 2019 propuso una iniciativa a nivel nacional con el objetivo de que todos los farmacéuticos pudieran ayudar a los clientes que desearan dejarlo. Han sido varios los Colegios Oficiales de Farmacéuticos de todo el panorama nacional, como de Barcelona, Madrid o Zaragoza, los que han impulsado diferentes proyectos para posibilitar que estos profesionales puedan tener finalmente la capacidad de asistir, a aquellos futuros exfumadores desde las oficinas de farmacia. La razón principal de las iniciativas, según Javier Plaza, el coordinador del grupo de Respiratorio y tabaquismo de la Sociedad Española de Farmacia Clínica, Familiar y Comunitaria (SEFAC), es que “dejar de fumar es siempre más sencillo con ayuda de un profesional”.

Si nos centramos en el papel del farmacéutico, lo fundamental es preguntar a los clientes la relación que tienen con el tabaco. En caso de que fumen, es necesario recordar las desventajas de hacerlo. En muchas ocasiones, esta simple conversación les sirve a los usuarios a interesarse por las medidas o las ayudas que pueden ellos seguir y necesitar para cesar este consumo. En el caso de que no fume o lo haya dejado, siempre es un punto de apoyo para el cliente recibir ese reconocimiento.

La realidad es que uno de cada cuatro fumadores pide ayuda al farmacéutico para dejar de fumar. En España, el 64% de fumadores ha intentado dejarlo en alguna ocasión. Está demostrado que, en general, la mayoría de personas que siguen esta práctica lo hacen debido a su entorno social y familiar.

Por su parte, Marian González, farmacéutica comunitaria de Vigo e integrante del grupo Respiratorio y Tabaquismo de la Sociedad Española de Farmacia Clínica, Familiar y Comunitaria (SEFAC), confirma que la gente les pide habitualmente consejo sobre este tipo de cuestiones porque “son los profesionales sanitarios más cercanos que tienen”. De hecho, la farmacéutica invita a los boticarios a “ser proactivos y aprovechar cualquier ocasión para preguntar a los clientes si fuman, felicitando si no lo hacen y ofreciendo nuestra ayuda a los que sí”. Se trata de una estrategia de fomentación positiva que tiene como fin primero conseguir que los fumadores, que no se habían planteado dejar de serlo, lo hagan. Sin embargo, la farmacéutica cuenta que desde el inicio de la pandemia estos hábitos se han polarizado y mucha menos gente acude a pedir consejo: “Algunos han intentado dejar de fumar (con diferentes resultados) y otros han consumido una mayor cantidad de tabaco”.

Productos más demandados para dejar de fumar

Los chicles de nicotina, que se quedaron con el 53% de la cuota de mercado en 2020 y el spray, con una cuota de mercado del 14% en 2020, son los artículos más demandados porque, entre otras cuestiones, son de indicación farmacéutica. Sin embargo, ha aumentado el interés por otro tipo de tratamientos que precisan receta médica.

La nicotina, según los expertos, es el tratamiento más recomendable, sobre todo, para los usuarios con una adicción y una dependencia alta, ya que funciona de producto sustitutivo. Se trata de una sustancia psicoactiva muy adictiva que se encuentra principalmente en la hoja del tabaco. El consumo de nicotina sin tabaco llega al cerebro por el aparato circulatorio a través de los productos que contienen esta sustancia. Esto hace que el deseo de fumar disminuya y se reduce el síndrome de abstinencia. La ventaja es que, en este caso, no produce adicción, ya que el contenido de nicotina en sangre es mucho menor que si nos fumáramos un cigarro.

Funciona principalmente si el objetivo es dejar su consumo en periodos cortos de tiempo. Sin embargo, es importante consultar previamente con el farmacéutico cómo llevar a cabo el tratamiento, ya que también conlleva diversas restricciones y normas que se deben seguir, si se quiere conseguir dejar de fumar.

Según Lorenzo Perni, a pesar de que la demanda de terapias sustitutivas para dejar de fumar había aumentado entre los años 2016 y 2018 (experimentó una subida de entre el 6 y el 7%), en 2020 se estancó.

Es importante destacar que, durante la pandemia, el rol del farmacéutico en este aspecto, y en otros muchos, ha sido decisivo, en cuanto a que han sido ellos los que han seguido más de cerca los tratamientos de los pacientes. Gracias a ellos, los clientes adquieren los conocimientos necesarios para saber utilizar y consumir todos estos productos correctamente. Además, proporcionan apoyo y acompañan a los usuarios para que continúen los tratamientos hasta el final y consigan su objetivo.

Entre los hábitos más frecuentes que los farmacéuticos recomiendan seguir, para servir de apoyo a los tratamientos contra el tabaquismo, son escuchar música, hacer ejercicio físico, realizar trabajos manuales y, en general, ocupar el tiempo con las cosas que a uno le gusten. “Es importante evitar las situaciones que puedan escapar a tu control y evitar, en la medida de lo posible, todo lo que te recuerde al tabaco”, señalan.