Con motivo del Día Mundial del Asma, el Dr. Josep Morera Prat, miembro de TopDoctors.es, nos explica en qué consiste la enfermedad y cómo convivir con ella.
El asma es una enfermedad crónica producida por la inflamación de las vías respiratorias y que como principales efectos produce tos y dificultad a la respiración. Hay consenso de que el asma aumenta a nivel mundial entre un 2 y un 30% dependiendo las áreas. En España la prevalencia es variable entre un 5 y un 10% según regiones, edades y sexo. Tal y como nos explica el Dr. Josep Morera Prat, especialista en Asma y miembro de la plataforma TopDoctors.es: “lo más importante es la prevención a la hora de mejorar esta enfermedad. Ayuda a prevenir el asma la lactancia materna, la dieta mediterránea y el ambiente limpio. Son factores de riesgo la obesidad desde la infancia, el contacto con mascotas a edad temprana y, sobre todo exponerse al humo de tabaco”.
Con motivo del Día Mundial del Asma, el Dr. Morera, nos explica en qué consiste la enfermedad y qué se puede hacer para sobrellevarla de la mejor forma posible.
La detección precoz
El asma en general tiene una evolución muy leve y si está bien controlada tiene pocos síntomas que interfieran en la vida del paciente. Tal y como nos explica el especialista de TopDoctors.es “para controlar esta enfermedad es muy importante contar con buena información, buena educación e instrucciones, autocontrol con medidores de flujo y control de peso”. Además, el Dr. Morera nos explica que “es importante la detección precoz del asma profesional que es muy común entre las mujeres de la limpieza por ejemplo o entre los fabricantes de materiales plásticos”.
Los síntomas de alerta que nos indican la aparición del asma, tanto en bebés como en adultos, es la presencia de tos persistente, una respiración dificultosa y ruidos respiratorios. El Dr. Josep Morera nos explica que “en el caso de los niños debemos llevar un buen control con el pediatra y cumplir los tratamientos prescritos. Pero, hay que tener en cuenta que, a veces, antes de los tres años muchos niños tienen pitidos sibilantes que después les desaparecen, es por esto que el pediatra debe mitigar esta preocupación e ir controlando la evolución”.
El tratamiento del asma
Los tratamientos más utilizados a la hora de tratar el asma son el Salbutamol y los corticoides a dosis mínimas mediante inhalación. En el caso de los tratamientos para niños menores de 5 años la administración debe ser mediante cámaras (“mascaras”) que ayudan a los más pequeños a realizar correctamente las inhalaciones indicadas por el especialistas. Hay que tener en cuenta, que un abuso en el tratamiento del salbutamol puede conllevar a taquicardias e insomnio y la utilización de los corticoides inhalados a dosis altas y prolongadas pueden raramente interferir en el crecimiento.
Otros avances en el tratamiento del asma, tal y como nos explica el miembro de TopDoctor.es, “son las terapéuticas con fármacos biológicos anti IgE u otras citokinas que son tratamientos prometedores pero caros y para pacientes seleccionados. También ha surgido la termoplastia que es una técnica aún para evaluar”.
Las alergias asmáticas
El Dr. Morera, miembro de TopDoctors.es, nos explica que “una gran mayoría de casos de asma son debidos a las alergias. Las más comunes son: la alergia al polvo por los ácaros (dermatophagoides), pelo de mascota, pólenes del ambiente y, en algunas áreas, a las excretas de las cucarachas. Aconsejo para control el asma alérgica conocer el origen a través de estudios alergológicos y evitarlo en lo posible, además de un tratamiento precoz y adecuado”
El asma y el deporte
En muchas ocasiones se tiene la idea errónea de que el asma impide realizar deporte a los afectados. El asma es totalmente compatible con la práctica del deporte, siendo un ejemplo de ello que un 25% de los competidores olímpicos son asmáticos. Tal y como nos explica el Dr. Josep Morera, “es conveniente que previamente a la realización del deporte este el asma controlada. En general recomendamos un broncodilatador de acción corta o prolongada, 20 o 30 minutos antes de iniciar el ejercicio físico. Sí que debemos tener en cuenta, que la natación es uno de los deportes de mayor riesgo para los asmáticos por la exposición al cloro”.