En 2013 sólo un 6,6% de las parejas lesbianas optaban por el método ROPA (Recepción de Óvulos de la Pareja) y ahora es superior al 40%
El porcentaje de fecundaciones in vitro (FIV) mediante la Recepción de Óvulos de la Pareja (ROPA), un tratamiento de reproducción asistida para parejas de mujeres homosexuales que permite que ambas participen biológicamente del embarazo, ha aumentado de forma exponencial en los últimos cuatro años. Según datos aportados por la clínica Barcelona IVF, la conocida como “doble maternidad” se está imponiendo a otras técnicas como la inseminación artificial y la fecundación in vitro con semen de donante. Según datos de Barcelona IVF, un 6,6% de los tratamientos realizados en la clínica durante 2013 eran mediante el método ROPA, ahora se prevé que supere el 40% al cierre de este año.
En palabras del Dr. Raúl Olivares, director médico de Barcelona IVF, “el motivo de que cada vez el ROPA se solicite más en detrimento de otros métodos es porque de esta forma ambas mujeres se sienten más vinculadas con el proceso de la maternidad. La elección de un tratamiento u otro, ya sea la Inseminación Artificial, la Fecundación In Vitro u el método ROPA, viene determinada por la valoración clínica y por sus preferencias”.
En concreto, el método ROPA permite que una pareja de mujeres puedan compartir su maternidad y formar una familia, siendo una de ellas la madre genética y la otra, la madre gestante, ambas tomando parte del proceso de reproducción asistida. Así, una de las mujeres de la pareja aporta los óvulos, adoptando el rol de donante, y a la otra mujer se le transfieren los embriones preparados en el laboratorio para conseguir el embarazo.
¿Ser madre genética o madre gestante?
Antes de empezar el tratamiento ROPA, se realiza un estudio de la fertilidad de cada una de las mujeres que desean ser madres, “ya que no están eximidas de ser estériles o presentar problemas de infertilidad por edad avanzada u otros problemas, como la endometriosis o factores tubulares, entre otros”, apunta el Dr. Olivares. Habitualmente la donante suele ser la miembro más joven de la pareja.
En cuanto a la carga genética del futuro bebé, esta estará determinada por la mujer que haya proporcionado los óvulos y el banco de semen utilizado.
Sin embargo, “durante el desarrollo embrionario se produce el fenómeno de regulación epigenética, que depende del ambiente en el que se desarrolla el embrión, en este caso el útero materno”, según el Dr. Luis Zamora, médico especialista en reproducción asistida de Barcelona IVF. “Por eso, aunque la mujer que se embaraza no transmite su carga genética al embrión, sí que influye en el desarrollo del futuro bebé”, ha puntualizado el Dr. Zamora.
La legislación
En la actualidad no existe un marco legal que regule el método ROPA específicamente, pero “lo que sí se exige para hacer este tratamiento es que la pareja esté casada”, ha detallado el Dr. Raúl Olivares.
Si la pareja de mujeres está vinculada legalmente por un matrimonio, la actual Ley de Reproducción Asistida de 2006 hace posible realizar el método ROPA, ya que el traspaso de óvulos no se considera una donación ya que ambas se consideran legalmente madres del bebé. Además, el matrimonio legal facilita el momento de inscribir el bebé en el registro civil.
“Barcelona IVF es una clínica de referencia en Reproducción Asistida a la que acuden pacientes de todo el mundo para conseguir embarazarse. El método ROPA es uno de los tratamientos que ofrecemos y tiene mucha demanda sobre todo por mujeres del mismo sexo de otros países en los que por un problema de legislación no pueden recurrir a tratamientos para conseguir un embarazo. Francia, por su situación legal y por su proximidad a España, es un país de donde provienen muchas parejas femeninas solicitando tratamientos para embarazarse”, ha asegurado el Dr. Raúl Olivares, director médico de Barcelona IVF.