Muchas personas sufren insuficiencia venosa, y por tanto de varices, que son venas anormalmente dilatadas. Las varices afectan fundamentalmente a las venas de las piernas y provocan síntomas como cansancio, pesadez, hinchazón o calambres
La aparición de unas protuberancias poco atractivas en las piernas, de un color azul o púrpura oscuro, puede ser una señal de venas varicosas. Éstas muchas veces causan hinchazón, dolor, calambres, etc. Por su parte, las arañas vasculares se parecen mucho a las varices, aunque con un tamaño mucho menor, ya que son dilataciones del árbol venoso más periférico, pero también de un color rojo o azul. Su importancia es más estética que clínica.
¿Cómo trabajan las venas de las piernas?
Las venas de las piernas hacen un arduo trabajo al transportar la sangre de regreso al corazón, en un desafío a la gravedad. Hay venas profundas que no son visibles en la superficie de la piel, y que pasan a través de los músculos los cuales las presionan mientras las piernas se mueven. Hay también venas que corren debajo de la piel, llamadas venas superficiales o capilares.
Por otro lado, los músculos, al comprimir las venas profundas, ayudan al empuje hacia arriba de la sangre. Además dentro de las venas existen unas válvulas que impiden que la sangre se acumule hacia los tobillos. Por eso, si una válvula en una vena superficial se debilita o se daña, la sangre puede fluir hacia atrás y causar presión adicional en la vena, haciendo que ésta se estire y ensanche y, con el tiempo, también se inflame. Esto puede conducir al desarrollo de venas varicosas, venas de hilo y venas arañas.
Las venas de las piernas trabajan para devolver la sangre al corazón. Esto se logra gracias a la contracción de los músculos de la pantorrilla, que presionan las venas y ayudan a impulsar la sangre hacia arriba. Si desea obtener más información sobre cómo trabajan las venas de las piernas, visite la revista farmanatur.
Posibles complicaciones
Afortunadamente, la mayoría de las personas que tienen venas varicosas no llegan a sufrir complicaciones relacionadas, sin embargo, un pequeño número de casos sí que podrían desarrollar, incluso varios años después de que aparezcan las varices, las siguientes molestias:
- Flebitis (tromboflebitis): Es una inflamación de la vena causada por coágulos de sangre (trombosis) en la vena. Los coágulos de sangre en las venas superficiales también pueden causar serias complicaciones como la trombosis venosa profunda, que origina dolor e hinchazón en la pierna.
- Eczema varicoso: Este trastorno causa piel seca, roja y escamosa. y Úlceras venosas: El aumento de la presión en las venas más inferiores de la pierna puede provocar un engrosamiento e inflamación de la piel, que lleven a formar este tipo de ulceraciones.
- Lipodermatoesclerosis: Generalmente afecta a las pantorrillas, con áreas de piel engrosada y roja. yEdema (o hinchazón): Puede darse tanto en la pierna como en el pie.
Si se nota cualquiera de estos síntomas, hay que consultar a un médico lo antes posible.
¿Por qué salen las varices?
Si bien algunas personas pueden desarrollar venas varicosas sin motivo aparente, existen varios factores de riesgo que incrementan las probabilidades de que aparezcan, entre otros los siguientes:
- El embarazo: Durante el embarazo hay más presión sobre las venas por la cantidad adicional de sangre necesaria para el desarrollo fetal, por lo que el flujo de sangre desde las piernas a la pelvis puede verse reducido, dilatando las venas en las piernas. Los mayores niveles de hormonas del embarazo también logran afectar a los vasos sanguíneos, haciendo que se relajen más de lo normal. Y finalmente, a medida que el útero crece, ejerce una presión adicional en las venas que se encuentran en el área pélvica. Felizmente, la mayoría de las mujeres que desarrollan varices durante el embarazo mejoran una vez que han tenido a su bebé al disminuir la presión sobre las venas.
- El envejecimiento: La pérdida de elasticidad en las venas es una consecuencia natural del envejecimiento, lo que provoca que se estiren y se vuelvan más débiles. Las válvulas en las venas de las piernas también pueden llegar a ser más frágiles debido al desgaste general, lo que causa pequeños estancamientos de sangre en vez de que ésta fluya de nuevo hacia el corazón. Ambas cosas son comunes a medida que cumplimos más años.
- Tener sobrepeso: Los kilos de más en el cuerpo provocan a su vez una presión extra en las venas y válvulas, que deben trabajar más duro para enviar la sangre de vuelta al corazón.
- Estar inactivo: El estar parado o sentado por períodos prolongados de tiempo puede incrementar el riesgo en el desarrollo de venas varicosas. Muchas personas creen que una ocupación en la que hay que estar parado una gran cantidad de tiempo aumenta el riesgo de desarrollarlas, pero en realidad existe poca evidencia que sugiera que sea cierto. Sin embargo tiene sentido, ya que estar de pie durante largo rato podría significar que la sangre no circula tan fácilmente como debería.
- Tener antecedentes familiares: Si otros miembros de la familia ya tienen venas varicosas, la probabilidad de desarrollarlas es más alta de lo normal.
- En ocasiones, una enfermedad subyacente podría ser la causa de que las venas varicosas se desarrollen, como por ejemplo: una lesión o trombosis en una vena profunda de la pierna, una hinchazón o tumor en la pelvis o una anormalidad de los vasos sanguíneos.
¿Quieres conocer los remedios naturales para tratar las varices? Sigue leyendo este artículo
¿Pueden prevenirse las venas varicosas?
Puede que no haya una manera de prevenir por completo las varices, pero existen varias cosas que se pueden hacer para que no empeoren, incluso para prevenir o retrasar que se formen otras nuevas.
- Levantar los pies: En la medida de lo posible, hay que tratar de mantener las piernas elevadas durante el descanso, para reducir la presión en las venas y mejorar el flujo sanguíneo. Lo más importante; al sentarse se debe evitar cruzar las piernas por encima de los rodillas o tobillos, ya que esto pone más presión sobre las venas. Si es posible, al acostarse, mantenga las piernas por encima del nivel del corazón (utilizando almohadas debajo de los tobillos, por ejemplo).
- Mantenerse activo: Se debe evitar estar sentado o de pie durante períodos prolongados para favorecer el flujo sanguíneo. Si tiene que permanecer sentado o de pie mucho tiempo en el trabajo, trate de tomar descansos regulares y dar un paseo para conseguir movimiento, y de este modo ayudar a la circulación de las sangre por las venas. Hay que realizar alguna actividad física al menos 150 minutos cada semana, ya que mantenerse en forma puede ayudar a tonificar los músculos, aumentar la circulación y favorecer la pérdida de peso (reducir el exceso de peso también incrementa la circulación y disminuye la presión sobre las venas). Elija actividades que realmente trabajen los músculos de las piernas, incluyendo: caminar a paso ligero, correr, andar en bicicleta, bailar y nadar.
- No llevar ropa ajustada: Es el momento de revisar esos vaqueros ajustados, ya que la ropa apretada alrededor de la cintura, de los muslos y de las piernas pueden empeorar las varices. Sin embargo, podría intentar el uso de medias de descanso, sobre todo si se va a estar de pie durante un largo tiempo. Éstas medias crean una suave presión que sirve de soporte a los músculos de las piernas y mejoran su flujo sanguíneo.
- Limitar los tacones: El uso de tacones altos durante largas horas aumenta el problema, ya que los músculos de la pantorrilla no se contraen tanto (como ocurre cuando se utiliza calzado plano), lo que reduce el flujo sanguíneo en las piernas. Para mejorar la circulación, hay que reducir la frecuencia de uso de los zapatos de tacón.
- Comer más fibra: El estreñimiento habitual puede incrementar la presión sobre la circulación en el abdomen, lo que también afecta al flujo de sangre en las piernas. Aumentar la ingesta de alimentos ricos en fibra ayuda a la prevención del estreñimiento crónico. Hay que asegurarse de que la dieta incluya variedad de frutas y verduras, y optar por el pan, arroz y pasta integral. Reducir el consumo de sal puede ayudar, ya que demasiada sal puede causar una retención de líquidos y conducir a la hinchazón de piernas, pies y tobillos.
Dejar de fumar: Los expertos creen que el hábito de fumar contribuye al desarrollo de venas varicosas. Si está teniendo problemas para dejar de fumar hay muchos productos disponibles que podrían ayudarle, como los chicles, pastillas y parches.
Remedios naturales para tratar las varices
En muchos casos, las venas varicosas no necesitan ser tratadas, (aunque muchos optan por aplicar técnicas de mejora estética), pero si se experimenta dolor y malestar el profesional de la salud puede recomendarle distintos tratamientos.
Por otra parte, se puede probar un enfoque más natural, con algunos remedios alternativos:
- El castaño de Indias: Expertos alemanes han investigado en profundidad el extracto de castaño de Indias, que es el tercer producto herbal más vendido en el país germano después del ginkgo y la hierba de San Juan. El castaño de Indias se utiliza sobre todo como un tratamiento para la insuficiencia venosa. Esto es porque las semillas del árbol contienen unos químicos llamados saponinas, que incluyen un compuesto llamado escina, y existe cierta evidencia que sugiere que la escina puede ayudar a sellar los capilares con fugas y mejorar la elasticidad de las venas, lo que reduce la inflamación.
- Las antocianinas: Estos compuestos antioxidantes, (incluyendo sus derivados, las antocianinas) otorgan a los frutos como los arándanos, frambuesas, moras y uvas rojas, así como a la col roja, cebollas rojas y berenjenas, su profundo y rico color rojo. También están disponibles en forma de complementos alimenticios, y contribuyen a sellar la filtración de los vasos sanguíneos, ya que ayudan en la reparación del colágeno en las paredes de los vasos y capilares. Un estudio sugiere que pueden tener un efecto antiangiogénico, lo que significa que pueden reducir el indeseado crecimiento que da lugar a las venas varicosas.
- Rutina: Este bioflavonoide es también un pigmento vegetal que se encuentra en frutas y verduras, siendo el trigo sarraceno la principal fuente en los suplementos alimenticios. También puede encontrarse en las manzanas y las flores de saúco. A menudo se utiliza para tratar las varices y hematomas, ya que fortalece los vasos sanguíneos y capilares. Contiene un grupo de sustancias químicas llamadas oxerutinas, que han demostrado en numerosos estudios, ser útiles para las venas varicosas en la mejora del dolor, hinchazón y cansancio de las piernas.
¡Descubra los beneficios de tratar las varices con productos de farmacia! Si está sufriendo de varices, siga estos consejos de farmacia para aliviar los síntomas y mejorar su salud. Los productos de farmacia pueden ayudar a reducir la hinchazón, la inflamación y el dolor, así como a mejorar sus piernas.