Cada una se centra en un aspecto relacionado con la pandemia: bulos sobre la enfermedad, consejos para colectivos vulnerables, gestión psicológica del confinamiento y cómo protegerse y aplanar la curva de contagios
El Grupo TEVA España ha distribuido a las farmacias de su red de ventas cuatro guías impresas con recomendaciones sobre: la prevención de contagios por coronavirus, los cuidados de pacientes vulnerables, la gestión psicológica del confinamiento y los bulos sobre la COVID-19.
Las farmacias comunitarias se han convertido, más que nunca, en puntos clave en materia de formación e información sanitaria. El objetivo de esta iniciativa es que estos profesionales ofrezcan asistencia y apoyo a través de materiales visuales durante la pandemia a todos aquellos que acudan a su establecimiento. Además de la distribución en papel, estos folletos, elaborados por TEVA y ratiopharm, están disponibles en las páginas web tevafarmacia.es y en ratiopharm.es. Los profesionales sanitarios solo tienen que descargarlos, imprimirlos a doble cara en formato DIN A4, doblarlos por la mitad y entregárselos a los pacientes.
El brote de SARS-CoV-2 y la etapa de confinamiento han creado nuevas dudas y necesidades en la población: ¿Quién forma parte de los grupos de riesgo? ¿Cómo realizar un buen lavado de manos? ¿Las informaciones que circulan por internet son ciertas? ¿Cómo afrontar psicológicamente la cuarentena? Estas y otras cuestiones están respondidas de manera sencilla y practica en estos materiales.
Pensando en los más vulnerables
La guía Consejos y recomendaciones sobre el coronavirus para personas vulnerables muestra quiénes forman parte de los colectivos más frágiles ante el brote del nuevo coronavirus SARS-CoV-2: personas mayores y pacientes con patologías previas.
Para ellos, se ofrecen una serie de precauciones, como el lavado de manos, la limpieza frecuente de objetos y mobiliario de uso doméstico y, evidentemente, quedarse en casa. En caso de tener que hacer la compra o ir a la farmacia, se aconseja pedir ayuda a familiares, amigos o vecinos.
Este documento también explica qué hacer en caso de no encontrarse bien e incluye recomendaciones para sobrellevar el estrés generado por el confinamiento, como mantenerse activo, comer de forma saludable y evitar la sobreinformación.
Protegerse y no contagiar para aplanar la curva
Por último, Aplanar la curva: cómo protegerse y no contagiar el nuevo coronavirus ofrece información práctica sobre los síntomas de la COVID-19, el periodo de incubación y las medidas de prevención necesarias.
La tos, la dificultad respiratoria, la fiebre y el malestar general son los síntomas más habituales de la COVID-19, que pueden surgir entre 1 y 14 días tras el contagio. En caso de que aparezcan, se debe contactar con el teléfono habilitado por cada comunidad autónoma.
En todo caso, se deben seguir una serie de medidas para prevenir el contagio, como realizar un buen lavado de manos: debe durar entre 20 y 40 segundos, y hay que utilizar agua tibia y jabón (o gel desinfectante, si no se tiene acceso a agua y jabón).
Más de 300 informaciones falsas
a hay más de 300 bulos sobre el coronavirus detectados y desmentidos por diversas fuentes oficiales y portales de verificación. Algunos hacen referencia al uso de antibióticos para prevenir y tratar el coronavirus, a la transmisión a través de picaduras de mosquitos o a la ingesta de líquidos calientes para combatir el virus.
El manual 10 bulos sobre COVID-19 frena las mentiras que circulan por la red. Es imprescindible acudir a fuentes oficiales y fiables, como la Organización Mundial de la Salud (OMS), el Ministerio de Sanidad, las consejerías de salud, los Colegios Oficiales de Farmacéuticos y los Colegios Oficiales de Médicos.
Gestión psicológica de la cuarentena
Por último: Consejos para gestionar psicológicamente el confinamiento, que muestra los diferentes estados que podemos experimentar durante este tiempo, como insomnio, frustración y miedo al contagio de la COVID-19, que, además, pueden agravarse debido a la sobreinformación y la difusión de bulos.
La solución ante estas sensaciones se encuentra en prácticas como establecer rutinas, informarse a través de canales oficiales o contrastados para evitar la desinformación y mantener el contacto con familiares y amigos.