El pasado sábado en el marco del XXII Congreso de la Sociedad Española de Gastroenterología, Hepatología y Nutrición Pediátrica (SEGHNP) celebrado en Murcia, donde se han reunido más de 400 expertos a nivel nacional e internacional para hablar principalmente de la nutrición de los más pequeños, se celebró un simposio dedicado a la composición lipídica y funcionalidad de la leche materna y a la evolución de las fórmulas para lactantes.
En el encuentro, organizado por el Instituto de Nutrición Infantil de Hero, expertos profesionales de la nutrición y la pediatría, trasladaron a los asistentes sus conocimientos sobre la leche materna, el mejor alimento que una madre puede ofrecer a su hijo en los primeros meses de vida, y sobre los beneficios, demostrados científicamente recientemente, de la grasa láctea y de los compuestos bioactivos presentes en su membrana.
El Doctor David Gil Ortega, de la Unidad de Gastroenterología y Nutrición Pediátrica, Hospital Clínico Universitario Virgen de la Arrixaca, Murcia, y el Doctor Ángel Gil Hernández, Catedrático de Bioquímica y Biología Molecular de la Universidad de Granada, hablaron de la grasa láctea y de cómo su importancia ha sido históricamente subestimada y relegada al mero hecho de su aporte energético. No es hasta la última década, cuando el punto de mira se centró sobre la capacidad de la grasa de la leche materna para influenciar el desarrollo del sistema nervioso, visual, e inmunitario. Los efectos beneficiosos de la grasa láctea en el niño así como otros compuestos similares, provenientes de la membrana del glóbulo graso, se postulan como los protagonistas del avance científico y técnico en la composición de las fórmulas para lactantes.
El Doctor José Manuel Moreno Villares, de la Unidad de Nutrición Clínica Hospital Universitario 12 de Octubre de Madrid, habló sobre la composición de la leche materna destacando que no sólo es un conjunto de nutrientes sino que también ejerce un factor protector sobre el lactante. El doctor destaca que la composición de ácidos grasos de la leche materna se ha relacionado tanto con la prevención de enfermedades, como con puntuaciones mayores en test de inteligencia e incluso en la valoración de la agudeza visual, durante los primeros años de vida. Según el Doctor Moreno “La composición lipídica de la leche materna es dinámica, el bebé come y la mamá responde”
El Doctor Juan José Díaz Martín. Unidad de Gastroenterología y Nutrición pediátrica AGC de Pediatría. Hospital Universitario Central de Asturias, Oviedo, afirma la gran evolución que han sufrido las fórmulas para lactantes, para aquellos niños que por cualquier razón no pueden ser amamantados, desde una composición con leche de vaca modificada hasta nuestros días, donde encontramos fórmulas con una composición cada día más cercana a la leche humana, según el Doctor Díaz “Existen evidencias que demuestran que la incorporación de compuestos bioactivos lipídicos presentes en la membrana del glóbulo graso lácteo mejora la función inmune, asemeja el patrón de crecimiento y mejora el neurodesarrollo del lactante”.
Acerca del estudio de investigación sobre la grasa láctea y sus efectos en el niño
Un reciente estudio llevado a cabo en Suecia y apoyado por Hero ha demostrado que una nueva fórmula con compuestos bioactivos presentes en la grasa láctea tiene efectos positivos sobre el desarrollo cognitivo e inmune del niño. El grupo de investigación ha sido liderado por el Profesor Olle Hernell de la Universidad de Umeå y Bo Lönnerdal de la Universidad de California, Davis, ha publicado los resultados recientemente en la revista American Journal of Clinical Nutrition (2014). El desarrollo cognitivo, medido con el test Bayley-III a los 12 meses de edad de los niños alimentados con la nueva fórmula obtuvieron resultados más altos que los niños que recibieron fórmula convencional. En cuanto al desarrollo del sistema inmune, los investigadores observaron que los niños alimentados con la nueva fórmula presentaron una menor incidencia de otitis media, una de las causas más frecuentes de visita al pediatra en los primeros meses de vida. Además, no mostraron diferencias en comparación con el grupo de niños alimentados a pecho. Esta investigación ha puesto de manifiesto la relevancia de grasa de la leche y sus componentes, presentes de forma natural en la leche materna, para las fórmulas infantiles. Animado por esta investigación y la opinión de los investigadores, Hero lanza una nueva gama de fórmulas infantiles basadas en la fórmula experimental, y va a continuar apoyando esta línea de investigación con un seguimiento de los niños participantes a la edad de 5-6 años para, con el tiempo, ser capaces de mostrar resultados a largo plazo.
