Sueños cumplidos, espacios lúdicos de aprendizaje, acompañamiento de niños en hospitales, fisioterapia en el agua y normalización del duelo son las áreas en las que se centran los nuevos proyectos
Pese a las difíciles circunstancias derivadas de la pandemia, este 2020, los ‘teamers’ de Cinfa siguen reuniendo microdonaciones para destinarlas a diferentes iniciativas sociosanitarias elegidas por ellos mismos a principios de año.
En concreto, se han entregado aportaciones de 3.500 euros a cinco proyectos, centrados en mejorar la calidad de vida de varios colectivos de diferentes formas: un espacio lúdico de aprendizaje para niños y niñas con discapacidad intelectual, un programa de actividades para normalizar el duelo en los más pequeños, acompañar a los niños y niñas ingresados en centros hospitalarios, ayudar a cumplir proyectos vitales de enfermos de esclerosis múltiple y un taller de fisioterapia en el agua con niños y jóvenes afectados por ataxia telangiectasia.
La Asociación D-Espacio agrupa a niños y jóvenes con discapacidad intelectual en un espacio donde realizar actividades y compartir un aprendizaje lúdico, motivador y alternativo. Como explica la secretaria de la entidad navarra, Mariana Jáuregui: “Cuando emprendimos este proyecto, hace 4 años, lo hicimos porque nos dimos cuenta de que, llegados a la adolescencia, estos jóvenes necesitan un entorno social y de ocio donde reunirse con sus iguales, para convivir, conocerse y divertirse. Entre unas cuantas familias, buscamos una sede, le dimos vida y se ha convertido en nuestro lugar de encuentro, donde los chicos y sus familiares nos sentimos como en casa”.
Actualmente, 33 niños de entre 3 y 20 años se reúnen regularmente para, de la mano de personal profesional y voluntarios de apoyo, llevar a cabo talleres de teatro, matemáticas, lenguaje o emociones, por ejemplo. Todo ello favorece el desarrollo de habilidades vitales para el logro de su autonomía. Mariana aclara que “de esta forma, se cubre un ámbito no atendido para su desarrollo personal, ya que el sistema educativo no proporciona esas alternativas e integra a estos jóvenes de una forma forzada para ellos. Tampoco incluye estos recursos en el sistema de becas o ayudas, por lo que implican una inversión económica para las familias”. En concreto, el ‘Teaming’ sufragará tres programas diferentes y complementarios que inciden en aspectos concretos en los que el retraso madurativo resulta más limitante: motricidad fina, matemáticas y comunicación verbal. “Ha sido un regalo llovido del cielo”, expresa Mariana. “Nuestro proyecto es más de corazón que otra cosa, así que contar con esta ayuda nos permite que la asociación y, sobre todo, los niños, sigamos avanzando”.
La persona de Cinfa que impulsó esta iniciativa en la empresa fue Belén Dean, de Regulatory Affairs, quien afirma que “para estos niños con capacidades diferentes, toda ayuda es poca, ya que la sociedad no siempre brinda estas oportunidades, por lo que hemos reunido una aportación muy valiosa para ellos y sus familias”.
Normalizar el duelo
Los ‘teamers’ también han colaborado para que otro programa de actividades lúdico-terapéuticas tenga continuidad. En este caso, “Pequeños pasos, grandes huellas”, de la Asociación Goizargi, está dirigido a acompañar emocionalmente a niños y niñas de entre 4 y 10 años que están viviendo un proceso de duelo. Como explica Sara Pérez, la psicóloga de esta asociación navarra, “consideramos que los menores son, muchas veces, los grandes olvidados en los momentos de pérdida y muerte de un ser querido, por lo que, con estos talleres, pretendemos hacerles partícipes y darles herramientas para que logren una vivencia sana del duelo. Además, también es muy importante para nuestra asociación normalizar la muerte, el dolor y esa situación vital por la que todos pasamos alguna vez”.
Estas sesiones son dirigidas por una psicóloga de la entidad, junto con un equipo previamente formado y cohesionado de personas voluntarias. “En ellas, el protagonista no solo es el niño, sino su sistema familiar y, sobre todo, sus adultos de referencia. En un espacio compartido entre iguales y mediante diferentes técnicas y recursos, trabajamos las emociones derivadas de un duelo, identificándolas, expresándolas y aprendiendo a gestionarlas. El objetivo es que la familia pueda llegar a hacer un buen acompañamiento a los niños en el duelo que están atravesando”, apunta Sara.
“Es un trabajo que venimos realizando desde hace muchos años –prosigue-, por lo que recibimos esta ayuda de parte de Cinfa como un reconocimiento a ese objetivo que tenemos de visibilizar el duelo y de transmitir que la muerte forma parte de la vida. Nos ha hecho mucha ilusión porque significa que algo está cambiando en nuestra sociedad en este sentido”, concluye.
Gracias al impulso de Dani Comes, trabajador del área de Producción de Cinfa y voluntario en Goizargi, esta entidad fue una de las escogidas por sus compañeros, algo que agradece enormemente “porque se trataba de un proyecto que se escapa un poco de lo común. Como sociedad, nos cuesta mucho mirar a la muerte y a veces nos sentimos perdidos a la hora de acompañar a una persona en duelo. Y si son niños los que están viviendo este proceso, todavía más. Por lo tanto, este taller es una ayuda fundamental para muchas familias”, resume.
Color en la nueva normalidad
Otro de los proyectos abordados ha sido el que realiza la asociación Pupaclown, Payasos de hospital, basado en prestar apoyo psicológico, terapéutico y de integración social a niños ingresados en el Hospital Virgen de la Arrixaca de Murcia. En palabras de Andrea Álvarez, del área de Desarrollo y Recursos de la entidad, “nuestra labor consiste en estar con ellos en sus habitaciones, en las salas de espera, en los procesos dolorosos, en las pruebas, antes, durante y después de entrar al quirófano… Y a través de la terapia de la risa y usando diferentes herramientas como cuentos, magia, música o títeres, ayudarles a normalizar estos momentos tan duros”.
Se trata de una intervención terapéutica totalmente personalizada, ya que “previamente, comentamos con los doctores el estado concreto del niño o los detalles de su situación. A partir de ahí, el papel del payaso es potenciar que el niño, además de enfermo, sea niño. Se ha comprobado que esta atención ayuda a reducir la ansiedad de los pequeños y a disminuir los efectos traumáticos derivados de su estancia en el hospital”.
Tras el confinamiento, en el que estos payasos cesaron su actividad por la pandemia, en junio regresaron al hospital con todos los protocolos de seguridad pertinentes e integrados con el equipo médico. “El reencuentro fue muy emotivo y con mucha alegría, porque, además, estamos viendo que es más necesario que nunca dar color al hospital”, concluye Andrea. Por eso, se muestra muy satisfecha de la elección que han hecho los trabajadores del laboratorio ayudando a Pupaclown: “Significa un impulso a la humanización de la sanidad y especialmente a la relación con uno de los colectivos más vulnerables: los niños”.
Desde la Red Comercial, José Luis Delgado, Jefe de Ventas de Especialidades, fue quien presentó este proyecto, y se muestra agradecido a sus compañeros “porque han sabido entender cómo de importante es la labor que desempeña esta asociación con los niños enfermos en hospitales”.
Otra de las iniciativas elegidas en esta edición del ‘Teaming’ es “Buscadores de sueños”, un proyecto que Esclerosis Múltiple Navarra puso en marcha gracias, entre otros, a la ayuda del laboratorio. “Conozco mucha gente en Cinfa porque trabajé allí hace varios años y me hablaron del ‘Teaming’ y de la posibilidad de participar”, comenta Josean Villanueva, trabajador social y director de EM Navarra. “Desde la asociación siempre buscamos vías de financiación para poner en marcha nuestros proyectos, por lo que nos pareció una buena oportunidad de conseguir apoyo”, apunta.
El proyecto está dirigido a personas con Esclerosis Múltiple y otras enfermedades neurodegenerativas que han alcanzado niveles de dependencia muy importantes y comienzan a abandonar sus proyectos vitales. “Con esta iniciativa, tratamos de cumplir los sueños de cada persona, pero trabajamos de una manera grupal, es decir, el proyecto propio ya no es individual sino que pasa a ser una historia colectiva. De esta manera, podemos ayudar también a otros pacientes a descubrir cuáles son sus propios sueños”, comenta Josean. Si bien el proyecto se puso en marcha a finales de 2019, se vio interrumpido por el inicio de la pandemia. A pesar de las dificultades, la actividad se ha ido recuperando y algunos de los sueños se han cumplido, como esquiar, montar en globo o ver un partido de Osasuna. Otros, como hacer surf, tendrán que esperar a que la situación se normalice, pero desde EM Navarra se muestran confiados, ya que “más tarde o más temprano lograremos cumplir todos ellos”.
Desde Cinfa, Óscar Urdíroz, de Logística, fue quien encabezó esta candidatura: “Conozco el trabajo de EM Navarra y sé que nuestra ayuda va a tener un destino precioso. De los 20 a los 30 años, todos tenemos nuestros proyectos vitales recién iniciados y cuando aparece el diagnóstico de esta dura enfermedad, todo se tambalea, se derrumba…y ahí está el equipo de profesionales de la asociación apoyando ese proceso tan duro. Me siento orgulloso de la solidaridad de nuestro equipo humano y de su contribución al bienestar de tantas personas”.
El último de los proyectos con los que ha colaborado el ‘Teaming’ se llevará a cabo tan pronto como la situación generada por la pandemia lo permita. Se trata de “Al agua patos”, un programa de fisioterapia en el agua con niños y jóvenes afectados por ataxia telangiectasia, una enfermedad genética y neurodegenerativa que aún no tiene cura. “Esta afección produce una discapacidad progresiva muy agresiva en niños a partir de los 5 años, que hace que tengan que usar silla de ruedas hacia los 9 años, con la crueldad añadida de que no conlleva afectación intelectual”, resume Patxi Villén, presidente de AEFAT, asociación que agrupa a las familias afectadas por ataxia telangiectasia en España.
Sobre el programa de fisioterapia en el agua, Patxi indica que “como estos pacientes presentan numerosas complicaciones respiratorias y de movilidad, la actividad acuática resulta muy beneficiosa para mejorar su condición física. Muchas familias llevan a sus hijos a piscinas en sus localidades, pero no conocen qué ejercicios son los más adecuados. Por eso, contamos con la colaboración de una fisioterapeuta especializada, con la que ya realizamos un taller el año pasado y que fue un éxito en cuanto a ambiente, resultados y motivación de los asistentes”.
Gemma Artica, del Departamento de Comunicación Corporativa de Cinfa, fue quien propuso el proyecto a los ‘teamers’: “Todos deseamos que nuestros hijos e hijas tengan una vida plena y feliz, pero a veces aparecen obstáculos que no esperabas y con los que tienes que luchar –explica-. La ataxia telangiectasia es una enfermedad muy dura. Los padres y madres de estos niños se han unido para intentar darles la mejor calidad de vida posible, motivarles y conseguir que sean felices. Por eso, poder ayudarles desde Cinfa es una alegría y un privilegio”.
El ‘Teaming’
El ‘Teaming’ es un proyecto de solidaridad en equipo que consiste en agrupar microdonaciones que realizan los empleados de una empresa. Así, las personas que lo desean, aportan un euro de su nómina mensual, que se destina a un proyecto concreto y tangible elegido por los mismos trabajadores y en el que la empresa también puede colaborar, como apoyo a los ‘teamers’, duplicando la cantidad reunida por estos.
Hace nueve años, Cinfa creó una página web sobre esta iniciativa de solidaridad en equipo para animar a otras personas a poner en marcha el ‘Teaming’ en sus empresas y ayudar en diversas iniciativas sociales. Para más información y para conocer las historias que han hecho realidad los ‘teamers’ del laboratorio, visita teaming.cinfa.com