El 19 de octubre es el Día del Cáncer Mama, una problemática que sufren cada año alrededor de 1.500.000 mujeres en el mundo y 25.000 en España (mujeres con edades comprendidas entre los 35 y 85 años). Existen diferentes casos de mujeres que han utilizado BIOXÁN durante el tratamiento para cuidar su piel.
“Las pacientes oncológicas tienen la piel hipersensible, así que la hidratación es algo más que un básico, debe ser todo un ‘fundamental’ en su día a día. De hecho, si la hipersensibilidad dérmica provoca sequedad severa, es recomendable aplicar crema hidratante más de una vez al día en cara, cuerpo, manos y pies. Tampoco un paciente oncológico puede olvidarse del sol y es imprescindible evitar a toda costa la exposición y utilizar, cuando se requiera, cremas con factor de protección”, comenta la creadora de BIOXÁN, Ana Victoria Ugidos.
“La hidratante que mejor puede tratar una piel de este tipo es aquella que regenere y sea específica para pieles sensibles, sin conservantes o aditivos, como toda la gama NEO de Bioxán. Hace 8 años nació mi sobrina y, a los 6 meses aproximadamente de venir al mundo, le diagnosticaron un cáncer. Fue en ese momento cuando empecé a elaborar la formulación de lo que hoy día es Bioxán, así que nuestras cremas son más que recomendables para todos. Hay que evitar a toda cosa exfoliantes y cremas anti-edad con aminoácidos”, añade.
Rostro, cuello, y escote
Limpiar y desmaquillar la piel cada día, mañana y noche. Y poner una crema hidratante regeneradora y, posteriormente, un protector solar. “Debemos aplicar primero la hidratante y encima la protección ya que si juntamos formulaciones perdería eficacia”, señala Ana Ugidos, creadora de BIOXÁN.
OJO: Los limpiadores y tónicos tienen que ser libres de alcohol. “Optar por cosmética con altas concentraciones de ingredientes de origen natural es la mejor opción: a base de extractos botánicos que mantengan el equilibrio del pH natural mientras producen un efecto calmante y descongestivo”, añade.
Cuerpo
“Para la limpieza corporal, se recomiendan duchas o baños no muy prolongados con agua templada y jabones de pH neutro. Es muy importante evitar rascados con las esponjas, llevar a cabo un meticuloso aclarado y secar la piel con toquecitos de toalla. La hidratación previene la sequedad y evita posibles picores e irritaciones. Es aconsejable hidratar la piel del cuerpo a diario (dos veces al día) para calmar, regenerar y proteger la piel”, comenta la experta.
Manos y pies
“La sequedad, hinchazón, irritación, sensación de hormigueo o retención de líquidos pueden ser algunos de los efectos secundarios del tratamiento oncológico. Es importante hidratar manos, pies y uñas de dos a tres veces al día con cremas ricas en ingredientes que aporten gran suavidad a la piel”, señala Ugidos.