La campaña durará hasta el 2 de junio y los farmacéuticos participantes llevarán a cabo también consejo breve para ayudar a dejar el tabaco
La Sociedad Española de Farmacia Familiar y Comunitaria (SEFAC) ha iniciado una campaña con farmacias de toda España para concienciar a la población de los riesgos para la salud de los productos de tabaco c por calentamiento, reforzar la prevención del tabaquismo y ayudar a los pacientes fumadores a que dejen de fumar. Esta iniciativa se enmarca en la Semana Mundial sin Tabaco, que tendrá su día culminante el 31 de mayo, con la celebración del Día Mundial sin Tabaco.
La campaña promovida por SEFAC se llevará a cabo hasta el próximo 2 de junio en más de trescientas farmacias de toda España. Leyre Gaztelurrutia, farmacéutica coordinadora del grupo de Respiratorio de SEFAC y miembro de la Junta Directiva del Comité Nacional para la Prevención del Tabaquismo (CNPT) explica que “los farmacéuticos interesados realizarán una encuesta a los usuarios de la farmacia sobre los riesgos del tabaquismo; en el caso de que el encuestado fume, se les realizará un segundo cuestionario con preguntas más específicas y el test de Fagerström y Richmond para conocer el grado de dependencia a la nicotina y motivación”.
De este modo, mediante intervenciones o consejo breve (con un mensaje directo, claro, entendible y personalizado en función de la situación de cada paciente) se quiere ayudar a abandonar el tabaco. “Un 10 por ciento de los pacientes consiguen dejar de fumar únicamente con el consejo breve y, en España, según la Encuesta Nacional de Salud 2018, el número de fumadores es de un 34 por ciento de la población (más de 10 millones de personas). Por ello, con una mínima intervención se conseguiría que un millón de personas dejara de fumar”, recalca Gaztelurrutia.
Productos de tabaco por calentamiento
Además, en la campaña se preguntará a los usuarios de la farmacia por el conocimiento de productos de tabaco por calentamiento (PTC). Los PTC son productos de tabaco procesado que son calentados en lugar de sufrir una combustión, lo cual produce aerosoles que contienen tanto nicotina como otras sustancias químicas procedentes de aditivos y aromas añadidos, los cuales son inhalados por los usuarios a través de la boquilla. “Estos productos están actualmente en auge y son igualmente dañinos para la salud”, advierte por su parte Sonia Cebrián, coordinadora de la campaña, quien añade que “por este motivo es importante informar y concienciar a la población para que no haya una percepción inferior del riesgo que con otros productos”.