Durante la mesa sobre los usos terapéuticos del cannabis, en la que también se ha presentado el caso de dos países con experiencia en su regulación: Francia y Canadá
El Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos ha celebrado, en esta segunda jornada del XXII Congreso Nacional de la Profesión Farmacéutica, la sesión de innovación ‘Uso del Cannabis con finalidad terapéutica, ¿una realidad próxima en España?’. Una mesa que ha girado en torno al uso del cannabis con finalidad terapéutica y de cómo asegurar una regulación y un sistema de dispensación óptimos son condiciones esenciales para garantizar la seguridad de los pacientes y el acceso al mismo con criterios de equidad.
Un tema de máxima actualidad en España, tras la aprobación, el pasado junio, del informe final de la subcomisión del Congreso de los Diputados a este respecto que dio seis meses de plazo a la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) para encajar las recomendaciones en la normativa, haciéndola viable, y permitiendo la disponibilidad en el mercado farmacéutico de extractos o preparados estandarizados del cannabis.
“La utilización de principios activos en su condición de medicamentos requiere de evidencia clínica demostrada de calidad, eficacia y seguridad, mediante la realización de ensayos clínicos, autorización de puesta en el mercado, indicaciones concretas, composición conocida, forma farmacéutica adecuada, demostración de actividad y posología adecuada para cada patología. Por tanto, estamos en un momento importante en este tema, en el que estoy seguro de que el papel de los farmacéuticos españoles será fundamental” ha afirmado Jordi de Dalmases Balañá, vicepresidente del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos y moderador de la sesión.
En ella han participado como ponentes Alain Delgutte, Presidente de la Sección de Oficina de Farmacia de la Orden de Farmacéuticos de Francia, donde se ha trabajado en un programa piloto de dispensación de cannabis en las farmacias; Mohamed Ben Amar, en representación de la Universidad de Montreal, Canadá y el Doctor Horacio Arruda, viceministro de Sanidad del Gobierno de Quebec, que han expuesto las experiencias de un estado con amplia experiencia en la legalización del uso de esta planta; y, completando la mesa, Carola Pérez quien, como presidenta del Observatorio Español de Cannabis Medicinal, ha ofrecido la visión de los pacientes a este respecto.
De acuerdo con Alain Delgutte, “en Francia, en el programa piloto que estamos desarrollando hasta marzo de 2023, la receta se realiza en el hospital y se dispensa a través tanto de la farmacia hospitalaria como comunitaria, precisamente para hacerla accesible. No se dispone de stocks en las farmacias, sino que se hace la petición directamente a los laboratorios, una vez el médico ha hecho la prescripción. Una vez llevado a cabo este paso, los farmacéuticos somos quienes acompañamos al paciente durante todo el tiempo que éste haga uso del cannabis con uso medicinal, hacemos la dispensación, el seguimiento y la anotación de los efectos secundarios. Algo que resulta verdaderamente gratificante, ya que somos una solución para paliar su dolor cerca de su domicilio”.
Por su parte, Mohamed Ben Amar ha expuesto el proceso de legalización que hubo del cannabis en Canadá tanto para uso medicinal como recreativo, indicando que las razones para llevarlo a cabo fueron que, “para empezar, tenemos ejemplos acreditados de su utilidad como remedio medicinal. Segundo, creo que, como sociedad, tenemos la responsabilidad de estudiar sus usos y acceso controlado, estableciendo propiedades, sistemas de dosificación y modos de consumo. Y tercero, en Canadá, la experiencia que tuvimos al llevar a cabo la legalización de su uso nos ha reportado más ventajas que inconvenientes, ya que todos los efectos negativos que se previeron, no se han llegado a dar”.
Coincidiendo con esta opinión, Horacio Arruda ha señalado que, en Quebec, “estamos viendo que la legalización del cannabis ha cambiado la percepción. Ahora hay más indicaciones, más modos de uso, más pacientes. Por ello, debemos tener un producto controlado, de calidad, con porcentajes adecuados de componentes. A este respecto, el farmacéutico es el profesional que está mejor situado para desarrollar esa relación con los pacientes”.
Carola Pérez considera que se debería avanzar más rápidamente en la legislación del uso medicinal del cannabis en España para evitar riesgos. “Tenemos que hacerlo bien para marcar una buena historia del uso terapéutico del cannabis, para lo cual, los pacientes sabemos que contamos con el apoyo total de los farmacéuticos”.
Otros temas que también se han abordado durante la sesión han sido los criterios que se deben tener en cuenta para garantizar la seguridad del paciente, desde la prescripción hasta la dispensación, pasando por el seguimiento farmacoterapéutico; los riesgos que entraña el uso lúdico del cannabis y la proliferación de productos con CBO sin indicaciones terapéuticas, que están generando un mercado al límite de la legalidad; o el papel que las farmacias comunitarias jugarán en los procesos de dispensación.